miércoles, 26 de septiembre de 2012

Técnicas y temas del oficio – El diario íntimo – Parte 3



El siguiente cuento de Pedro Orgambide, titulado Día duro, está estructurado basándose a fragmentos mínimos de tiempo, gracias a los cuales crece la intensidad y se constituye el personaje típico de una adolescente:


“A las 11.30 del sábado la adolescente se levanta de la cama y lo primero que hace es prender el televisor. Cambia de canal. Vuelve a cambiar. Apaga.
A las 11.40 levanta el tuvo del teléfono para comprobar si tiene tono.
A las 12 se prepara un té y lo toma mirando por la ventana, mientras con el dedo va escribiendo su nombre en el vidrio empañado.
A las 12.30 se para en medio del living y le declara al mundo que se está aburriendo. Dice en voz alta ‘Estoy aburrida’.
A as 12.35 se sienta en un sillón con una pila de revistas, las hojea y as va tirando al piso.
A las 12.45 deja el sillón, va a la cocina, vuelve de la cocina, va al dormitorio, vuelve del dormitorio, se detiene otra vez en la mitad del living y se lamenta: ‘Estoy aburrida’.
A las 12.50 vuelve a prender el televisor.
A las 13 apaga el televisor y prende la radio.
A las 13.20 se para delante del espejo, se mira argo y dice: ‘Estoy fea’.
A las 14.05 abre una carpeta y escribe un poema que se titula: ‘Aunque nadie me entienda’.
A las 14.40 vuelve al espejo, se estudia con cuidado y dice: ‘Estoy gorda’.
(…).
A las 18.10 suena el teléfono. La adolescente se abalanza a atender y en el camino voltea una silla. Antes de levantar el tubo se contiene, hace una pausa y cuando dice hola su voz suena indiferente y un poco misteriosa y también un poco lánguida. Sostiene un diálogo con frases entrecortadas, afirmaciones y negativas. Por momentos sus respuestas se endurecen y después se ablandan, aunque nunca demasiado ni para un lado ni para el otro, y se nota que está manejando con cuidado alguna estrategia para poder seguir disputando una posición de fuerza.
A las 18.20, con tono neutro, acepta concurrir a una cita dentro de media hora.
A las 18.23 se despide, cuelga, levanta los brazos, suelta un gritito y ríe.
A las 18.24 corre a cambiarse de ropa y hay gran ruido de cajones que se abren y se cierran.
A las 18.30 se mete en el baño, se peina, se pinta los ojos y canta en voz baja.
A las 18.40 se pone la campera y se prepara para salir. Llega hasta la puerta, pega media vuelta, regresa, se para delante del espejo, se mira de frente, se mira el perfil derecho, se mira el perfil izquierdo, dice: ‘Que linda soy’ y se va.”


Como se puede observar, si eliminásemos los indicadores horarios no se conseguiría el mismo efecto en el cuento anterior.
Sin embargo hay partes del diario de Katherine Mansfield donde se reemplazan las referencias de las fechas por epígrafes o títulos tales como: Los ríos de la China; La cocinera; La muerte; etc. que cumplen la misma función.
Evidentemente, los mecanismos organizadores del relato son, en ambos ejemplos, las referencias que los dividen en fragmentos.
 Y tu... ¿Has tenido alguna vez diario? ¿Cómo lo usas o has usado?

viernes, 14 de septiembre de 2012

Técnicas y temas del oficio – El diario íntimo – Parte 2


Modelos de diarios literarios

El plan general de un diario íntimo corresponde fundamentalmente a las vivencias o a las circunstancias cotidianas. Se puede decir que facilita la exploración del yo. Literariamente, se suele construir desde el punto de vista de un narrador a través del cual se enfoca la exploración.
Abarca un determinado espacio de tiempo, incluidos días en blanco y lagunas temporales.
Los modelos de diarios existentes se caracterizan por:

1         Tiempo verbal: presente de indicativo (tiempo neutro): “Estoy”.

Refuerza la credibilidad del lector al coincidir el tiempo de la escritura, “ahora”, con el tiempo siempre presente de la lectura.

Ejemplo:
      “1936, 10 de abril
Cuando un hombre está en mi situación sólo le queda hacer examen de conciencia. No tengo motivos para rechazar mi idea fija de que cuanto le sucede a un hombre está condicionado por todo su pasado; en resumidas cuentas, es merecido. Evidentemente, buenas las he hecho para encontrarme en este punto.”

El fragmento anterior es de El oficio de vivir, de Cesare Pavese, un diario en el que se interroga acerca de la poesía, de su estilo y de la existencia:

      “Estoy triste, me siento inútil, como un dios.”

El diario de Pavese fue encontrado a su muerte entre sus papeles, dentro de una descolorida carpeta verde, sobre la cual estaba escrito a lápiz ojo y azul:

El oficio de vivir de Cesare Pavese




Igualmente ha ocurrido con los diarios de Anaïs Nin escritos durante medio siglo, un documento intensamente personal con el que se han identificado muchos lectores a partir de su publicación después de la muerte de su autora. Explora a través de ellos temas como la neurosis, la feminidad, las relaciones entre arte y vida:

      “Mayo de 1944
¿Será capaz la vida exterior, con su continuo trajín, de destruir la vida interior? (…) Mi tendencia a relacionarme, conversar, consolar reflexionar e interpretar es menos frecuente. Intensa actividad en la imprenta. Hay que hacer una tirada de más de cuarenta grabados. Después vuelvo a casa a darme un baño, cenar, recibir a algunos amigos, atender llamadas telefónicas e ir de visita. Casi no tengo tiempo para explicar lo que me pasa. La vida de los demás, los hechos de los demás. Aquí el teléfono sustituye a las cartas.”

2  Tiempo verbal: pretérito perfecto: “He estado” ó pretérito imperfecto: “Estaba/ Vivía” (se puede utilizar en un diario de recuerdos).

Ejemplo:
      “Tempestad de nieve. Estaba trabajando en This Hunger (El Hambre) cuando mi máquina de escribir se estropeó. Salí afuera, a pesar de la nieve, para llevarla a arreglar. Cuando regresé, ya no tenía ganas de continuar describiendo la vida de Djuna en el orfanato y el hambre que había pasado. Me apetecía hablar de la nieve. Describí cada imagen, cada sensación y cada fantasía que había experimentado durante mi paseo. El temporal de nieve me hizo retroceder en el pasado, a mi adolescencia inocente, llena de deseos, a mis dieciséis años, intimidada y tensa. Comparaba mi adolescencia con la fría adolescencia de otros jóvenes de hoy. Todo esto se fusionó: la nieve, el frío del miedo, la frialdad de la virginidad; la pureza, la inocencia, y siempre el imprevisto miedo de desvanecerse bruscamente. Escribí todo lo que tenía que decir. Y cuando acabé, me dí cuenta que había descrito la adolescencia de Djuna, y las adolescentes contradicciones de otros jóvenes. Redacté treinta y ocho páginas sobre la frialdad en la mujer y en el hombre, sobre Djuna y el orfanato, su hambre.”
Anaïs Nin, de su Diario


Fotograma de Henry & June (1990), película de Philip Kaufman basada en el diario íntimo de Anaïs Nin


3  Las referencias temporales:

El texto del diario se diferencia de los otros textos literarios por la explicitación de espacio y especialmente del tiempo.
Explicitar el topónimo del espacio en el que sucede lo narrado puede deberse a una actitud de relación emotiva con ese lugar, y así se fija en la escritura; o sea, se hace como frontera decorativa del texto. Sin embargo, para el lector es un dato significativo, no es igual decir “Estocolmo” que “Caserío de la cañada”. Los nombres de las ciudades, pueblos o villas condicionan la lectura, enmarcan las confesiones del protagonista. La narración del tiempo es imprescindible. Incluso sería una diario aquel que contuviese muy pocos datos además de las fechas

Ejemplo:
      7 de marzo: no vino.
      8 de marzo: no vino.
      9 de marzo: no vino.
      10 de marzo: estuvo a punto de venir, pero me llamó por teléfono.
      11 de marzo: habló por teléfono a las 10 de la mañana y a las 5 de la tarde.
      12 de marzo: ni siquiera me llamó por teléfono.
      13 de marzo: ¡Al fin! Llegó por sorpresa a las 8 de la mañana.


Espero que os haya gustado tanto como a mí...

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Técnicas y temas del oficio – El diario íntimo – Parte 1


El diario íntimo

Tal vez sea el diario íntimo la forma más amplia de la literatura. En él se pueden incluir todos los géneros y sus variantes siempre que se haga empleando la primera persona. El yo que escribe tamiza todo lo que se le antoja a través de su punto de vista personal y lo apunta en su diario como registro íntimo o como registro externo; como fragmento de novela o como novela entera; como poema, relato o libre asociación, cuya columna vertebral la constituyen las indicaciones de año, mes, día, hora y a veces minutos y hasta segundos.
Del mismo modo, los novelistas o los escritores de cuentos han elegido el diario íntimo como forma productiva..

El diario es contradictorio

El diario íntimo se mueve en un territorio contradictorio que es su detonante. Oscila entre lo caótico y lo organizado.

Contradicción entre:

·  Lo caótico:
en un diario se puede apuntar todo lo que al autor se le ocurra subjetivamente.

·  Lo organizado:
en un diario hasta los mínimos fragmentos de tiempo vienen dados desde el mundo objetivo.

¿Por qué decimos que la contradicción ente la más extrema subjetividad y la más extrema objetividad es un motor productivo del diario íntimo?

1         Porque es la escritura menos obligada y, al mismo tiempo nos ofrece un cauce que nos facilita la tarea.
      Aparentemente se escribe cada día (de allí, el nombre de diario) y para uno mismo
      Decimos “aparentemente” pues no siempre se hace cada día y no siempre es para uno mismo aunque de entrada ésa sea la pretensión.
      Nos referimos en especial a quienes sienten placer por la escritura creativa, lo cual indica que más tarde o más pronto lo consignado en el diario será la materia prima de un texto “para lectores”.

2  Porque aunque en e diario íntimo es válido escribir todo, las pautas temporales que lo estructuran son ineludibles (si se las elude deja de ser un diario).
      
      Esas pautas estimulan las ideas.
      Uno puede encontrarse paralizado frente al papel en blanco y las ideas empiezan a fluir al tener que responder las preguntas que diferentes momentos del día constituyen.

O sea:

La propuesta:

quiero escribir

y su consecuencia inmediata:

¿qué escribo?

se facilita si ante la misma consigna: “quiero escribir”, nos encontramos con una serie de pautas:

·        5 de mayo, a las 12

·        5 de mayo, a las 12 y 10

·        5 de mayo, a las 3 de la tarde

Las pautas son: las 12, las 12 y 10 y las 3 de la tarde.
Cada instante puede implicar una variedad de actos realizados que sin dichas pautas no hubiéramos registrado. En este sentido, las marcas temporales, en especial las correspondientes a las horas, minutos o incluso segundos son buenos disparadores de ideas y argumentos.

Por ejemplo:
Retomando las citas anteriores podemos deducir:

      5 de mayo =   primavera
                                 principio de mes
                                 etc.

Luego, podríamos agregar deducciones de tipo personal, según lo que cada uno asocie con esa fecha determinada.

Por ejemplo:

      5 de mayo =   conocí a Teresa
                                 me compré la moto
                                 nos casamos

Con respecto a las horas señaladas, se trabaja de la misma manera. Cada hora indicará un aspecto de tipo general y uno particular.
Por lo tanto, uno de los modos de superar el bloqueo frente al papel en blanco es apuntar diferentes indicadores temporales (fecha, hora, etc.), y comenzar a escribir lo que estos indicadores nos proveen.

viernes, 7 de septiembre de 2012

Secretos y recursos de la creatividad – El germen de una idea – Parte 5


TALLER DE TEXTOS

Los gérmenes productores de ideas se provocan, se prueban, se investigan y se combinan tal como se puede comprobar resolviendo las siguientes propuestas prácticas.

Propuesta 1 – Variaciones

Desarrollar gérmenes para ideas siguiendo los pasos señalados a continuación:

1      apuntar una idea a partir de los gérmenes indicados en este apartado:

·  ínfimos
·  pequeños
·  grandes
·  enormes
·  fragmentados
·  completos

2  escribir otra idea combinando dos de las resultantes en el punto 1


Propuesta 2 – Títulos

Trabajar con los gérmenes de las ideas siguientes:

·  nubes amarillas
·  lápiz roto
·  preso político
·  estampita
·  estantería vacía
·  postales

Emplearlos como títulos de diferentes capítulos de una posible novela.


Propuesta 3 – Describir

1   Describir un árbol tal como lo vemos en la realidad.

2  Describir un árbol imaginario.


Propuesta 4 – Dar vuelta
    
Dar vuelta al siguiente fragmento de Miguel Delibes, eligiendo para realizar esta operación alguno de los objetos que lo componen:

“Cuando tu madre me abrió la puerta, no me atreví a mirarla a los ojos. Estaba ofuscado y me encaminé derecho a la librería. ¿Qué buscas? Venía detrás de mí, pero yo callaba. Sabía que en cuanto me mirara a los ojos, lo descubriría todo (…). Había decidido no revelárselo hasta el día siguiente, con la nueva luz, pero ella, consciente de mi esfuerzo por eludirla se apartó de mí.”


Propuesta 5 – Dialogar

Imaginar a tres mujeres que dialogan sin escucharse las unas a las otras.


Propuesta 6 – Interrogantes

Responder a los interrogantes del siguiente texto, luego eliminar los interrogantes y reescribirlo incluyendo las respuestas

·  ¿Es de plata el reloj del conejo blanco?
·  ¿Y qué piensa la Reina Loca?
·  ¿Qué le dicen a Alicia?


miércoles, 5 de septiembre de 2012

Secretos y recursos de la creatividad – El germen de una idea – Parte 4



La actitud de apertura

Cada individuo tiene una actitud diferente frente al mundo. Cada ser humano posee su propia perspectiva que le induce a una visión particular de la realidad. Lo mismo sucede con la que adopta durante el acto creativo, es decir, en el tiempo que se puede denominar anterior al texto.
Ser conscientes de dicha actitud puede ser beneficioso a la hora de prepararse para escribir. Será otra herramienta de trabajo. Plantearse:

¿Cómo iniciamos nuestro proceso de creación?

Recurrimos a la gama de posibilidades que ha esquematizado el alemán Julius Petersen:

1    La inspiración inmediata, fulminante irrupción de la idea artística en el sujeto, “la expresión inmediata de la vivencia”, “la inspiración mística”.

2   La inspiración febril y dolorosa, o caótica, por la que el artista se siente presa de un proceso nervioso que le produce angustia y excitabilidad.      

3   La concentración consciente intuitiva, o constructiva: un esfuerzo coordinado del artista que funde diversas representaciones (vividas, literarias, plásticas) para crear la obra.    

4   La reflexiva, donde una idea previa atrae a una serie de ideas secundarias aportadas por la observación o el recuerdo, y

5   La crítica productiva, según la cual las obras surgen por reacción (así, por ejemplo, el Quijote frente al Amadís y otros libros de caballerías).        


Nota personal: quizás estés pensando “está bien conocer este tipo de esquemas, como el del alemán Petersen, pero realmente esto… ¿me ayudará a escribir? – yo tengo mi estilo, mi forma de inspirarme y de vivir la escritura, así que desde el punto de vista práctico esto no me vale de mucho”, pero, como otras veces antes, hemos visto y veremos que muchas cosas se pueden mejorar entrenando, y muchas veces ese entrenamiento puede ser tan sencillo como conocer cómo se puede iniciar el proceso de creación, para así no agobiarnos por no recibir el “soplo” de la musa pero tampoco descartar un “arrebato” productivo como algo que no se pueda usar para crear… de manera natural, todos llegaremos a nuestro propio estilo, que será el más productivo y fácil para cada uno, y que a lo mejor será diferente al que ahora creemos que es el nuestro. No olvides esto para no cerrar las puertas al que a lo mejor es en verdad tu estilo. Una vez encontrado sin duda, y sólo entonces, deberemos configurar nuestro entorno de escritura para favorecerlo.


En general, tratándose de la creación literaria se debe señalar que comprende dos etapas principales:

         la intuitiva
         la de configuración.

Por otra parte, no olvidar que trabajamos con la palabra cuyo valor cotidiano recreamos.


La sugerencia:
Observarnos a nosotros mismos y tomar nota de qué fases atravesamos en el proceso de creación. No olvidar que, en cualquier caso, el medio a través del cual desarrollaremos el germen que consigamos es el lenguaje; configuremos nuestra vida en consecuencia.



“No hay espejo que mejor refleje la imagen del hombre que sus palabras”
Juan Luis Vives




Recapitulando…


1 Formarse imágenes tanto de lo conocido como de lo desconocido y jugar con ellas para formar más ideas.

2  Las ideas se mueven, por lo tanto debemos estar alertas.

3 Las ideas son puntas de hilo detrás de las cuales se extienden más metros de hilo.

4   Cuando durante el proceso de escritura las ideas se multiplican y nos desvían, es el momento de detenerse y elegir.

5 Prestar atención y memorizar conduce a imaginar, o sea, a colorear ideas.

6  Elegir bien el lugar donde escribir ha de motivarnos.

7 Responder con lo atípico es una manera de generar la idea.

8  Estar abiertos a nosotros mismos y observar nuestras actitudes frente al acto de crear y así aprovecharlas mejor.