“Mentir no es
sólo decir lo que no es. También y sobre todo significa decir más de lo que es,
y, en lo que respecta al corazón humano, decir más de lo que se siente. Esto es
algo que hacemos todos para simplificar la vida.”
A.
C.
El hombre rebelde, La peste y El extranjero son los mejores
libros del francés Albert Camus, que vivió la cargada atmósfera entre las dos
guerras mundiales. EL pesimismo que caracterizó ese momento histórico domina la
obra de Camus, que escribió un ensayo sobre la “sensibilidad absurda”. Así
denominó a la sinrazón reinante en el mundo y como una metáfora del tema fue
considerada su novela El extranjero, cuyos procedimientos de escritura
lo han convertido en un clásico y que aquí analizamos desde este punto de vista.
1
Una prosa sin ornamentos

“Hoy ha muerto mamá. O quizás ayer. No lo sé.
Recibí un telegrama del asilo.”
Y
algo más adelante dice:
“Cuando mamá estaba en casa, pasaba el tiempo
en silencio, siguiéndome con la mirada. Durante los primeros días que estuvo en
el asilo lloraba a menudo. Pero era por la fuerza de la costumbre. Al cabo de
unos meses habría llorado si se la hubiera sacado del asilo. Siempre por la
fuerza de la costumbre. Un poco por eso, en el último año casi no fui a verla
ya. Y también porque me quitaba el domingo, sin contar el esfuerzo de ir hasta
el autobús, tomar los billetes y hacer dos horas de camino.”
2
El recurso de la contradicción
En El extranjero,
Camus hace un uso magistral de este recurso en el personaje principal: bajo una
apariencia de simpleza y falta de imaginación aparece una personalidad capaz de
mostrar también todo lo contrario.
Al
respecto, han opinado diversos escritores.
- Sartre dijo que a través del relato
jadeante de Meursault se discernía una prosa poética más amplia que lo
potenciaba.
- Nathalie Sarraute señaló:
“Ese
Meursault que se muestra, en ciertos puntos, tan insensible, tan tosco, y como
un poco atontado, revela por otra parte un refinamiento de gusto, una
delicadeza exquisita. El estilo mismo en que se expresa hace de él, más que el
émulo del héroe mugiente de Steinbeck, el heredero de la princesa de Clèves y
Adolfo. ”
3
Un personaje inolvidable
El
protagonista de El
extranjero, Meursault, es uno de los personajes inolvidables de la
literatura. Tampoco se olvidan fácilmente el árabe, el capellán de la prisión y
el juez de instrucción, porque en El extranjero los personajes se dan a conocer
unos a otros.
Veamos
algunas de las características de Meursault:
1 Es
condenado porque rechaza mentir, sin embargo, no es un rebelde.
2 Dice
Camus:
“Meursault,
contrariamente a las apariencias, no quiere simplificar la vida. EL dice lo que
es, rehúsa enmascarar sus sentimientos y al instante la sociedad se siente
amenazada.”
3 Es
indiferente ante las situaciones que alteran a los demás, como la muerte de la
madre, el sufrimiento ajeno, el amor, la religión, la libertad, y su
indiferencia les provoca miedo, rechazo, y lo condenan.